LA RESISTENCIA

Éramos de papel
cicatriz
caricia a destiempo
brisa en la cara
cerveza,
éramos voces rotas
encontrándose en todos los ecos,
el valor desarmado en cada cajón
la risa ahogada
el renglón borroso.
Éramos viejos sabios
que se abotonaban las camisas y el miedo
que cerraban las cremalleras y el amor
que lo vivieron todo antes de los veinte
y estábamos rotos,
soñadores y locos
que iban a chupitos con la parca
que se drogaban con ayeres
en todos los parques,
que fuimos reyes en todas las camas
ajenos en todos los espejos
valientes cobardes
que lo daban todo en la próxima apuesta
la última tirada
el penúltimo botón
las migajas
la sangre seca en todas las bocas
el arañazo que escuece en todas las espaldas.
Éramos el último cartucho
del último sueño
de todas las jugadas.
Éramos valientes que no daban la cara
culpables de romper todos los espejos
ladrones de miradas
muertos de sed
sudor
carcajadas,
coleccionistas de utopías
payasos funámbulos
niños decrépitos que nunca supieron bailar
viejóvenes que dejaron de creer en las hadas demasiado pronto
que abrazaron muy rápido a sus fantasmas,
coleccionistas de monstruos dentro y fuera del armario
debajo de la cama
chocándonos los hombros
compartiendo boca seca y saliva
arañazos
heridas
temblando,
muertos de miedo y en vida
intentando escapar de nosotros
de no ser otros
más de lo que fuimos
o seremos,
serenos y aislados
cabizbajos y quietos
porque nos han robado los sueños
han vendido nuestros parques
nuestro suelo
nuestros anhelos,
nos han intentado cortar las alas
pero aquí seguimos,
rabiosos y libres
partiéndonos los huesos
en nombre del amor y el honor
sin nada que perder
esperando nuestro turno,
resistiendo.

Deja un comentario